Las matemáticas surgieron
como consecuencia de algunas necesidades que el hombre comenzó a experimentar,
entre ellas, hacer los cálculos esenciales a la actividad comercial y por
supuesto, hacerlos bien para que la misma pudiese seguir existiendo, para medir
la tierra y para poder predecir algunos fenómenos astronómicos. Mucha gente
supone que estas carencias fueron las que provocaron la subdivisión actual de
las matemáticas, en estudio de la cantidad, estructura, cambio y espacio.
La mayoría de los objetos de
estudio de las matemáticas, los números, la geometría, los problemas, el
análisis, son todas cuestiones que seamos o no seamos estudiosos o fanáticos de
la materia debemos conocer porque de alguna u otra manera se relacionan con nuestra
actividad cotidiana, aun cuando nuestra profesión o quehacer esté bien alejado
de la resolución de problemas matemáticos. Por ejemplo, para una ama de casa,
es sumamente importante tener nociones matemáticas para resolver o decidir
compras en el supermercado, entre otros.